Ayer se preveía partido de los grandes en el Vicente
Calderón. Probablemente dos de los equipos más en forma de la primera división
se enfrentaban, con la sensación de que el derrotado se alejaba de manera
inexorable del gran objetivo de la Champions.
Son dos equipos en situaciones muy parecidas, en cuartos de
final de la Europa League, competición que a esta altura de campeonato no
quieres ni puedes tirar a la basura y que hay que disputar al 150%, ya que una
final en Europa es un dulce muy apetecible y, por otro lado, el objetivo de la
cuarta plaza en la Liga, que te lleva a disputar la Champions, o por lo menos
la previa y que es un objetivo NECESARIO E IMPRESCINDIBLE para las arcas de los
dos clubs.
Entrenadores de gran nivel, apasionados del fútbol, con
mucho carisma y que sacan todo el jugo a cada uno de sus jugadores.
Dos plantillas cortas, con muchos minutos en sus piernas y
en los que el cansancio por jugar miércoles y domingo les está llevando al límite.
Bajo estas circunstancias, cualquier pequeño detalle podía
decantar el partido hacia un lado o hacia otro y en principio la lluvia en
Madrid, que tanta falta hacía, le venía bien al equipo del norte. Sin embargo,
estamos hablando de fútbol y de dos equipos con mucha clase que no pueden ni
quieren verse afectados por esas tonterías, más molestas para el aficionado que
para el jugador. Lo que sí influyó de verdad fue, por un lado, la ausencia de
Fernando Llorente en el Athletic, pieza fundamental al ser referente en todas
las jugadas de ataque de los “leones” y por otra la seriedad en el juego de los
madrileños, que no se desconcentraron en 85 minutos de partido, y solo los
cambios de futbolistas al final del partido, haciendo que Juanfran pasara de
jugar de lateral derecho a extremo izquierdo y por último de mediapunta, por
ejemplo, parece que desconcentraron al plantel.
Se destacan los goles de Falcao pero es un jugador que hace
mucho más en el terreno de juego. Partido a partido está creciendo como
futbolista, no solo mete goles como dejó
bien claro ayer, sino que participa mucho más en la creación de jugadas y eso
es algo que agradecen el resto de compañeros, que no solo lo tienen como
referencia en el área sino que también lo buscan en la mediapunta donde parece
que se “defiende” bien, con paredes y pases a Adrián, Arda, Koke, Juanfran,
Silvio… Esta posición no le resulta desconocida ya que jugó en esa demarcación
hace muchos años en River Plate, curiosamente entrenado por el Cholo.
Ayer Juanfran volvió a hacer un partidazo, dando una maravillosa
asistencia en el segundo gol. Desde aquí os tengo que reconocer que cuando lo
fichamos en el mercado de invierno dos temporadas atrás, me pareció que tiramos
a la basura los 7 millones de euros que nos costó. Sin embargo, y con la plena
confianza del entrenador, he descubierto un gran jugador, no solo polivalente,
ya que está jugando en una posición desconocida para él, también muy técnico y
físicamente muy fuerte, me parece que está siendo el más regular de la
plantilla por el momento. A todo esto hay que unirle los detalles que tiene con
la afición, como regalar la camiseta a un niño después de beberse su botella de
agua, o las declaraciones en prensa en las que siempre nos alaba y demuestra
sus ganas por triunfar y darnos títulos.
Filipe Luis estuvo inconmensurable defendiendo y atacando
por su banda, me empieza a recordar al jugador del Deportivo de La Coruña.
Arda Turán desplegó mucha clase durante todo el partido y
hace que la baja de Diego Ribas se note menos.
Godín y Miranda parecen dos murallas infranqueables, Courtois
decisivo en sus apariciones y Perea que jugó un rato en la segunda parte, fue
fundamental en las últimos minutos del partido al robar varios balones muy
complicados para los nuestros y evitar un par de goles seguros.
Sigo teniendo dudas de nuestro centro del campo, ya que ayer
Koke, Gabi y especialmente Mario Suárez siguen jugando muy plano y uno ya no
sabe si es por instrucción de Simeone o por falta de calidad. Aún así, Koke
tuvo dos o tres pases al hueco preciosos e incluso tiró una falta que estuvo a
punto de entrar y que demuestra que va cogiendo galones en este equipo. Pero es
evidente que necesitamos a Diego Ribas y a Tiago ya.
El ajustado resultado no refleja la realidad sobre el
terreno de juego, en donde fuimos muy superiores a un Athletic bastante plano y
sin mordiente. Me fui muy satisfecho porque seguimos dando la cara en cada
partido y con la sensación de que cualquier equipo que pise el Calderón solo
nos puede ganar por ser mejores futbolísticamente y aún así van a sudar su
victoria.
En breve, la lucha por pasar a las semifinales de la UEFA
Europa League y un poco más adelante, un derbi apasionante, con el rival
jugándose la liga y con nosotros luchando por la cuarta plaza. Lástima que se
vaya a jugar el miércoles a las 10 de la noche, horario lamentable para un
partido con tanta historia y tanto en juego.