viernes, 28 de octubre de 2011

LAMENTABLE

Vaya imagen que dimos anoche. No sé ni que decir o como expresarlo sin recibir una querella.

Ayer no jugamos a nada, en realidad pienso que en la segunda parte nuestros jugadores hicieron huelga encubierta y no quisieron jugar. Nadie se salva porque nadie aportó nada, empezando por Manzano y terminando por Falcao.

El señor Manzano vino a nuestro club como tercera opción después de Luis Enrique y Caparros, lo cual ya demuestra que nuestros dirigentes no tienen ni puta idea del cual quieren que sea nuestro estilo de juego, porque los tres son completamente diferentes, y también que no tienen credibilidad ya que los dos primeros no quisieron embarcarse en esta aventura desconfiando de una directiva con mala fama en este mundillo. Además el Señor Gil y el Señor Cerezo tenían opciones diferentes ya que uno prefería a este señor y el otro quería a Pantic. Ahora, y hasta donde sé, el Señor Gil no quiere despedir a Manzano porque no quiere pagar la indemnización…

Los jugadores no tienen claro cual es el sistema, ya que hemos jugado un 4-4-2, un 4-3-3, un 4-1-4-1,… tampoco saben cual es su posición ya que unos días pueden jugar de medio centros, otros de media punta otros de extremo, y tampoco saben si son titulares, suplentes o castigados, ya que lo mismo son titulares, que se van a la grada o al banquillo. Al principio de la temporada parecía buena idea, ya que la sensación que se transmitía era que todos los jugadores eran importantes y válidos, pero ahora no se transmite esa misma sensación, más bien la de “desquicie” total en el equipo.
El Señor Manzano también tiene en su contra que no conoce el estilo de juego ni el carácter de sus jugadores. Está consiguiendo que Falcao parezca un paquete y se le empieza a cuestionar, pero es que Falcao no puede bajar a buscar balones, ni hacer paredes fuera del área, ni empezar a regatear a 20 metros del área. Es como si a nuestro portero le pedimos que cuando saque el balón de la portería lo haga driblando contrarios hasta el centro del campo. No se da cuenta que necesita otro delantero al lado que haga ese trabajo y el dedicarse a rematar.
Tampoco ve que los medio centros de nuestro equipo tocan el balón mucho menos que Arda Turan o que Diego Ribas y eso no es posible. Es como si en el Barcelona Xavi tocara el balón mucho menos que Messi.
Nuestro juego debería empezar con el dominio del balón por parte de Gabi, quizá el mejor de nuestro equipo en esa posición, para controlar bien el tempo del partido. Justo eso, es una de los cosas que nos ha caracterizado en este inicio de temporada, el control del balón, pero ayer ya no lo tuvimos y parecía que queríamos jugar al contragolpe, pero como os dije en el anterior artículo, lo hacemos sin sentido, alocadamente. Vamos que también hemos cambiado el sentido de nuestro juego.

De todas maneras, la actitud de nuestros jugadores ayer fue muy triste, ya que se vinieron abajo de una manera lamentable. Ni orgullo, ni ganas, ni “na de na”.
Uno espera que jugadores de tanta calidad no se dejen ganar ante rivales peores que ellos, pero es lo que está pasando. Yo sigo viendo los jugadores que componen nuestra plantilla y me parece un equipazo, demostrándolo al principio de la temporada, pero ahora son un chiste mal contado.

¿A que espera nuestra directiva? No se si la solución es despedir al Señor Manzano, pero algo hay que hacer ya que nos hundimos en la clasificación de la Liga, la Europa League se nos puede escapara entre los dedos y nuestra situación va a peor.

Mucho ánimo compañeros de pasión.

domingo, 23 de octubre de 2011

¿SIN POLVORA O SIN IDEAS?

Este Atleti ha ido de más a menos y no me refiero solo a este partido, sino a lo que va de temporada.
Con la llegada de Ardá Turán, Adrián, Pizzi, Silvio, Miranda, Salvio, Falcao y sobre todo Diego Ribas, nos ilusionamos porque vimos buenos jugadores y solución a errores del pasado. Lo que no generó tanta ilusión fue Gregorio Manzano, el descartado después de Caparrós, el impresentable, o Luis Enrique, la incógnita.

Con los primeros partidos de competición, nos vinimos arriba con toda la razón del mundo, porque jugamos muy bien, tocando el balón con criterio, algo que se había olvidado en el Calderón y que buscábamos como el Santo Grial; generando ocasiones de gol y convirtiéndolas. El equipo jugaba como tal, como once miembros con un mismo objetivo y eso incluía la presión, que era desde muy arriba y por parte de todos.
Sin embargo, en el partido contra el Barcelona empezamos a cambiar, empezando por la presión, totalmente inexistente ese día, y nos llevamos una goleada. Fue despertar de un sueño muy bonito con un jarrón de agua fría. Para algunos fue ponernos en nuestro sitio, para otros algo normal, para nuestro entrenador un partido imposible de ganar a no ser que jugáramos contra los juveniles… Lamentable manera de justificar un mal planteamiento y de humillar a tus jugadores al indicarles que ellos no pueden ganar a ese equipo…

El equipo empieza a jugar diferente porque ciertos jugadores se ponen en posiciones donde no rinden igual. Un ejemplo es Diego Ribas que es media punta y, sin embargo, durante algunos partidos juega de extremo izquierda. Seguimos teniendo el balón, con posesiones altas, controlamos el partido en tres cuartos de campo, pero empezamos a demostrar falta de frescura en el cuarto final, aún así se meten goles.

En los últimos partidos sigue el declive, es nuestro el balón, pero lo jugamos sin sentido, nos perdemos en pases que no nos llevan a nada, no centramos al área, en realidad no tiramos prácticamente a puerta. Parece que el partido es nuestro, damos sensación de peligro, pero en realidad no lo generamos.
Empezamos a ver jugadores desesperados como Falcao que tiene que bajar a buscar los balones que no le llegan, a Reyes que intenta regatear buscando una jugada que no llega porque tampoco tiene apoyos o Diego Ribas que recorre todo el centro del campo, intentando cosas pero está mal acompañado, tanto por Mario Suárez como por Tiago. Gabi aporta algo más, pero me gustaría ver a Koke y en ciertos partidos a Assunçao.

Hoy, volvemos a tener el balón, pero el juego empieza a ser más feo. La falta de frescura es total, jugamos muy atolondrados. No me queda claro si queremos jugar al pase al pie, al balón largo o al contragolpe, por el centro o con los extremos… o todo a la vez. El problema es que cada vez tiramos a puerta con menos peligro y esto incluye los córners. Hoy hemos sacado muchos, muchísimos, pero ninguno con peligro, porque la estrategia es lamentable, con exceso de “Gilicorners” y precipitación.
Cuando queda casi toda la segunda parte, el equipo se revoluciona y parece que faltan cinco minutos y jugamos como locos al ataque, empleando la velocidad, pero sin control y eso es muy poco fructífero. Insisto, parece que generamos peligro, pero solo parece, en definitiva estamos más rato cerca de su área que lejos, pero falta algo más y que hoy por hoy no tenemos.

¿Culpables? Pues no lo sé, de verdad, aunque esta vez no creo que sean los jugadores, ya que al final de cada partido pienso que, individualmente, todos han estado bien, no muy bien, ni excepcional, simplemente bien y eso es mucho más que otras temporadas, así que debe ser el sistema o como se entrena el sistema o como se transmite la manera de jugar ese sistema.
Manzano propone un sistema que no me desagrada, pero no está haciendo que sus jugadores lo desarrollen bien y tampoco creo que saque el mejor partido de todos sus jugadores (a Falcao no lo puede alejar tanto del área, Señor Manzano).

En fin, que el Bilbao espera el jueves relamiéndose, el Zaragoza vendrá esperanzado y el Udinese tranquilo y mientras tanto nosotros preguntándonos qué coño pasa, porqué con buenos jugadores, con un sistema que debería funcionar, no jugamos una puñetera mierda y con la incertidumbre de saber cuanto durará esto.

jueves, 20 de octubre de 2011

SE ME ACABA LA PACIENCIA

Pues sí amigos, este equipo que me ha generado tanta ilusión, con jugadores de calidad, con un sistema ofensivo y con intención creadora, me está empezando a tocar … la moral y mi paciencia y mi ánimo empiezan a desmoronarse.

El Atleti ha salido con un juego un poco dubitativo. El sistema con dos mediocentros en lugar de tres y con Diego Ribas de mediapunta parecía que nos costaba, sin embargo y poco a poco nos empezamos a hacer con el partido y a dominar. El Atleti ha tenido el balón prácticamente todo el partido y hemos podido ver al segundo clasificado de la Liga Italiana mirando nuestro juego, muy atrás, en ocasiones incluso con siete jugadores en su área.

Este dominio es total en tres cuartos de campo, pero justo en el importante, en el área rival, el Atleti se hace “la picha un taco” y se nos apagan todas las velas que iluminan nuestro juego ofensivo. Nos liamos con muchos pases en corto innecesarios en lugar de rematar a puerta porque hay miedo a fallar y reina el “toma, tira tú que a mí me da la risa”. Se intentan paredes entre centenares de piernas y cuando más cerrado está nuestro rival no jugamos con los extremos para abrir el campo y poder tomar de nuevo el control del juego.

Si nos centramos en jugadores, Diego Ribas, que me parece un jugador impecable, termina desesperado e intentando cosas que son imposibles y al final poco o nada efectivas.

Parece que si Falcao no mete gol, no lo mete nadie en este equipo, pero es que necesita alguien a su lado que le ayude en la delantera y Adrián es ese jugador ya que le puede abrir huecos al arrastrar a algún defensa a otras zonas, dar pases de gol como hizo en la pretemporada y por supuesto meter goles cuando el colombiano no está fino. También es verdad que a Falcao le veo muy pesado, lento, le cuesta zafarse de los defensas, pero no podemos decir que es un mal jugador y no podemos compararlo con otros delanteros. El es así y nos va a dar muchas buenas tardes.

En general, casi todos los jugadores han estado a buen nivel, como Pizzi que tiene mucho regate pero le falta precisión y un poco de cabeza, o Assunçao que ha hecho un gran partido dando mucha seriedad al centro del campo, cortando y no perdiendo el balón, jugando mejor que Mario Suárez o Tiago…
A decir verdad, no todos los jugadores han estado bien porque Perea no puede jugar en nuestro equipo. Se equivoca en tres de cada cuatro pases que intenta, no está atento al rival que le termina robando el balón en muchas ocasiones y lo peor es que esas perdidas son en nuestra área. Es verdad que en el primer gol del equipo, hay varios jugadores despistados, pero el que menos atento está es él. Perea es un problema en nuestro equipo ya que genera inseguridad en sus compañeros, no aporta nada en ataque y en defensa es el mejor delantero del rival.

Me empiezo a cansar de nuestra falta de gol, de nuestra falta de fluidez en el último pase, en los contragolpes lanzados de manera desorganizada y terminados de manera torpe, de tener el balón sin acabar las jugadas con tiros y de empatar o perder de manera injusta, porque hoy no hemos merecido perder.
Empiezo a pensar que los jugadores no están contentos con el Señor Manzano y que se lo quieren cargar. Demasiado pronto pero sino no lo entiendo.

Me voy a comprar algo de aquaplast para intentar cimentar mi fé en este equipo, porque se empieza a resquebrajar y eso no nos lo podemos permitir.

¡¡¡ SIEMPRE ATLETI !!!

lunes, 3 de octubre de 2011

LASTIMA

Este domingo el Atleti se enfrentaba con un rival directo, al que los aficionados tenemos entre ceja y ceja, el Sevilla. Todos sabíamos lo importante de este encuentro, ya que después de dos partidos malos, el equipo tenía la obligación de volver a la senda del buen juego y del triunfo, sobre todo en casa.

A diferencia del partido contra el Barça y el Rennes, salimos a presionar arriba. Uno de los secretos del Barcelona, es la fuerte presión de todos sus jugadores, que empieza en la delantera con Messi y Villa mordiendo a los defensas e impidiendo que puedan sacar el balón limpiamente. El Rennes, con más poder físico que técnico, sabía que su arma era evitar que nuestros jugadores tuvieran la pelota presionando todo el tiempo.

Parece que tanto Manzano como los jugadores se dieron cuenta que ahora el Atleti tiene “jugones” que necesitan el balón y la única manera de tenerlo es presionando al rival lo más arriba posible, impidiendo que piense y que pueda desplegar su fútbol. Exactamente eso fue lo que hicimos, presionar, defender, robar y atacar.
Es verdad que al comienzo de la segunda parte, el Sevilla se despertó e intentó tener más el balón, pero nuestro equipo tiene más calidad en el centro del campo (joder, que gusto da decir esto) y nos terminamos imponiendo.

¿Por qué no ganamos? Porque Falcao no tuvo su día, fallando un gol debajo del larguero, y porque Javi Varas, cancerbero del Sevilla, paró todo lo posible y lo imposible.

Creo que Manzano tardó mucho en hacer los cambios. La segunda parte de nuestro equipo reclamaba a Gabi, pero no por Tiago, que no es que hiciera mucho, pero más que Mario Suárez que estuvo muy flojo, tanto que por su culpa el Sevilla tuvo una ocasión clarísima en manos de Manu del Moral, que Courtois paró de manera excepcional.
Reyes estaba muy cansado y también tendría que haber salido antes y yo también hubiera sacado a Adrián.

En definitiva que nos fuimos pensando que había sido una lástima, un partido bien jugado, con ocasiones pero empatado. Yo no me desespero, porque sigo diciendo que el fútbol pone a los equipos en su sitio, y yo veo fútbol en nuestro equipo.